Publicado Diciembre 19, 2022
42. DIOS ES CON NOSOTROS
Isaías 41: 10.
“No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.”
Él Dios todo poderoso les asegura a sus siervos fieles que, sin importar los problemas que tengan, él los va a apoyar.
“Estoy contigo”.
Jehová les dice a sus hijos que no deben tener miedo.
- No están solos; él sabe por lo que están pasando, Él escucha sus oraciones.
- Es como si estuviera allí mismo con ellos, ver I Pedro 3: 12.
“Yo soy tu Dios”.
Les recuerda a sus hijos y siervos que Él sigue siendo su Dios y que cuentan con su aprobación, tranquilos.
- Pueden estar seguros de que, pase lo que pase, él cuide de sus hijos, ver Hebreos 13: 6.
“Yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.”
El Padre deja muy claro que sus hijos pueden contar con su ayuda, lo reafirma tres veces.
- Su “Mano”: Si caemos, Dios extiende su mano derecha y nos levanta, ver Isaías 41: 13.
- Su Palabra: Dios ayuda y fortalece a sus hijos con la Biblia... Nos da consejos para enfrentar la escases, el problema, la enfermedad o la muerte de un ser querido.
- El Espíritu Santo: Les guía a pensar con claridad en los problemas que los abruman.
Del Desierto Al Cielo.
Nuestro camino al cielo se encuentra a través del desierto de este mundo.
- El alma del hombre está en la miseria sin Dios y busca la satisfacción por si mismo y termina cansado y traumado de buscar en el mundo.
- Sin embargo, nuestro suministro constante, viene de la mano de Dios.
- Abriré ríos de gracia y de agua viva, Jesús dijo esto hablando del Espíritu en Juan 7: 37 y 38.
- Estas bendiciones son para los pobres de espíritu, que anhelan el perdón y santidad divina.
- Dios bendecirá las almas estériles pero fructíferas en la guía gracia del Espíritu Santo.
Contexto:
Dios consuela a los judíos fieles que más tarde fueron llevados cautivos a Babilonia.
- Él les dice que en el final del destierro ocurrirían amenazas a Babilonia y destrucción a las naciones vecinas.
- Mientras Babilonia y las naciones vecinas estarían muertas de miedo, su pueblo no tendría de qué preocuparse porque Jehová los protegería.
- Para que se sintieran seguros les dijo tres veces “no tengas miedo”, ver Isaías 41: 10.
- Las palabras de Isaías 41: 10, iban dirigidas a los judíos fieles desterrados en Babilonia, pero Jehová las conservó para consolar a todos sus siervos, ver Romanos 15: 4.
- Jehová ayudó a sus hijos y siervos en el pasado y lo sigue haciendo hoy.
Isaías 35: 3 y 4.
”Fortaleced las manos cansadas, afirmad las rodillas endebles. 4 Decid a los de corazón apocado: Esforzaos, no temáis; he aquí que vuestro Dios viene con retribución, con pago; Dios mismo vendrá, y os salvará”