Publicado Febrero 11, 2023 | Pastor Michel Calle

65. CONFIAMOS EN DIOS

Salmo 23: 4. “Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo; Tu vara y Tu cayado me infundirán aliento.”

65. CONFIAMOS EN DIOS

Dios cuida y protege a sus hijos, en todo tiempo y cuando pasan por momentos difíciles.

  • Este versículo muestra a un pastor que cuida a sus ovejas, y nos da un ejemplo de como Dios cuida a sus siervos
  • La "sombra de muerte", o la oscuridad de la muerte, no implica, que sea mera sombra, sino que es el modismo hebreo, para la oscuridad más negra; o una posición rodeada de grandes peligros y muerte, ver Salmo 44: 19 y Job 24: 17.
  • Pero también la muerte misma en su aspecto más sombrío, ver Job 10: 21.
  • Ambos sentidos valen en este versículo; En todos los peligros, y especialmente en el último y más difícil, tenemos una razón más poderosa que David para "no temer mal alguno".
  • El cuidado salvador de Dios por él, incluso en un momento en que ese cuidado podría parecer que ya no está disponible, David alaba, "incluso" en tal extremo.
  • La oscuridad es la de la medianoche, cuando las bestias están afuera buscando su presa.
  • El "valle" es a causa de las colinas boscosas, las guaridas de las bestias salvajes.

                                                                                                                                                           Un camino duro, pero en victoria.

Los verdaderos creyentes, aun que viven bajo la protección de Dios, están expuestos a muchos peligros, los mismos que afectan a toda la humanidad.

  • David sabia que viviría adversidades, pero él se apoyaría en la providencia de Dios.
  • David no se siente solo cuando pasa por situaciones muy duras, que este versículo compara con un lugares oscuros y sombríos, un lugar donde su vida corre peligro.
  • Él se siente a salvo, como si Dios estuviera ahí mismo, a su lado.
  • Los pastores usaban su vara para proteger a las ovejas de los depredadores.
  • También usaban su cayado que era un palo largo con uno de los extremos curvo para guiar a las ovejas y apartarlas del peligro.
  • De manera similar, Dios, él Pastor cariñoso y protector y guía a su pueblo.
  • En los momentos más oscuros y peligrosos, Dios nos cuida, guía y consuela con su palabra, ver Romanos 15: 4.
  • Él nos oye las oraciones dando paz espiritual, mental y emocional, a través del Espíritu Santo o siervos que Él usa para esto, ver Filipenses 4: 6 y 7 y Hebreos 10: 24 y 25.
  • Les da la esperanza segura de un futuro mejor, cuando él quite todo lo que les está haciendo sufrir, ver Salmo 37: 29 y Apocalipsis 21: 3 al 5.

 Contexto.

Este Salmo fue escrito por David, pasando de pastor en su juventud a rey de Israel en su adultez, ver I Samuel 17: 34 y 35 y II Samuel 7: 8.

  • El salmo describe a Dios como un Pastor que guía, alimenta y reconforta a sus siervos, igual que lo hace un pastor con sus ovejas, ver Salmo 23: 1 al 3.
  • Este Salmo 23: 4, muestra a David menciona la protección que Dios da, a sus íntimos.
  • David, no temía, porque sabía que Dios se preocupaba por él y que conocía bien sus problemas.
  • Los versículos 5 y 6, la comparación cambia: ya no hablan de un pastor con sus ovejas, sino de un anfitrión con sus invitados.
  • Un anfitrión generoso, Dios trata a David como un invitado de honor.
  • Ni siquiera los enemigos de David pueden evitar que Dios cuide de él.
  • David termina este Salmo expresando su confianza en que la bondad y el amor de Dios lo acompañarán el resto de su vida, y se refrenda este amor en I Pedro 2: 25.

Apocalipsis 19: 9.

“Y el ángel me dijo: Escribe: Bienaventurados los que son llamados a la cena de las bodas del Cordero. Y me dijo: Estas son palabras verdaderas de Dios”