Publicado Febrero 19, 2023 | Pastor Michel Calle

67. LA OBEDIENCIA A LA VERDAD

Marcos 1: 15. “Diciendo: El tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado; arrepentíos, y creed en el evangelio.”

Jesús comenzó a predicar en Galilea, después que Juan el Bautista fue puesto en prisión.

Jesús declaro que el Reino de Diosse había “acercado” porque él, que en él era la manifestación del Reino y también seria su Rey prontamente.
Jesús no dijo que el Reino ya había empezado a gobernar aquí en la tierra.
Se debe tener en cuenta que las grandes verdades que Cristo predicó, partieron llamando al ser humano al arrepentimiento.
Pero él llamo a otros para que fueran parte de esta misión divina aquí en la tierra.
Más adelante les dijo a sus discípulos que ese Reino vendría en el futuro, ver Hechos 1: 6 y 7.
Jesús había llegado justo a tiempo, según las profecías sobre el Mesías, aparecería el que iba a ser el Rey.
Por eso Jesús dijo: “Hoy se ha cumplido esta Escritura”, comenzando su ministerio público, es decir, predicar el evangelio, las buenas noticias del Reino, ver Lucas 4: 16 al 21 y 43.
Para que la humanidad se beneficiara por las buenas noticias del Reino, debían arrepentirse, es decir, cambiar su manera de pensar por los pecados que habían cometido y les habían provocado placer en el pasado y comenzar a vivir de acuerdo con las normas de Dios.
Los que se arrepentían demostraban que tenían fe obediente a las buenas nuevas del Reino de Dios.
A través del arrepentimiento le damos gloria a nuestro Creador a quien hemos ofendido; y por la fe obediente retenemos el regalo de la salvación de nuestros pecados.

Nota:

En el hebreo la palabra arrepentimiento es “Teshuva”, que significa: “Reconexión con la eternidad y voluntad de Dios”.

En el griego es “Metanoia”, que significa: “Cambio de la manera de pensar” humanamente, como cuando se estudia una carrera que cambia la manera de pensar.
El arrepentimiento sin reconexión con Dios es solamente “REMORDIMIENTO”.

El Llamamiento.

Aquellos que son llamados por Cristo, deben tomar la decisión de dejar todo para seguirlo; y por su gracia están dispuestos a hacerlo.

No es que tenemos que salir del mundo, pero debemos saber que ya no pertenecemos al mundo; abandonar todo lo que no agrada y ofende a nuestro Padre, ver Marcos 8: 34.
Jesús mantuvo una disciplina estricta en cuanto a su negación a si mismo.
Hay muchas cosas en la doctrina de Cristo, que son asombrosas; y cuanto más nos es revelada su vida, tenemos más motivos para admirarlo.

Contexto:

Jesús pronunció estas palabras al principio de su ministerio en Galilea.

En el evangelio de Mateo 4: 17 dice… “Desde entonces” Jesús predicó el Reino de Dios.
El Reino de Dios fue el tema central del ministerio de Jesús y, de hecho, aparece más de cien veces en los cuatro Evangelios, la mayoría por boca de Jesús.
Jesús habla más del Reino de Dios que de cualquier otro tema.

Mateo 3: 2 y 3.

“Y diciendo: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado.
3 Pues éste es aquel de quien habló el profeta Isaías, cuando dijo:
Voz del que clama en el desierto:
Preparad el camino del Señor,
Enderezad sus sendas”